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sábado, 26 de marzo de 2011

Agoniza el Recuerdo en la Memoria

Yace mi soledad como gaviota
varada en cualquier playa sin arenas
cansada de aletear su desencanto
sobre un cielo gris, plomizo y frio
que nunca dio cobijo a mis pesares.

Se silencia mi voz ante el vacío,
de frente, en esta ausencia inagotable…
Converso con el loco
que dio vida a mis versos
antítesis perfecta
del hombre que te habita
bajo esos pliegues de piel sin equipaje
ni apegos destacados…

Agoniza mi recuerdo en la memoria
de un tiempo en que los dioses
eran deidades invencibles,
y no mitos de barro
proclives a quebrarse.

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