Se hará un hueco el reproche
inexorable y firme,y anidará inflexible,
violento en la batalla
sepultando a su paso
razones y argumentos
para salvar la causa
vestida de nobleza…
Y después, cuando todo sea escombro
y retumben con fuerza los agravios
sobre el afecto desnudo y mal herido…
Germinarán las semillas del rencor
en los campos hambrientos
sembrados de silencios…
Una voz racial, endeble y rota
gritará su desdicha en el vacío
mientras el cielo llora
la amistad que agoniza…
Y sin misas ni flores
ni cruces en la arena
enterrará el recuerdo la memoria
de los años añejos…
Y seremos ausencia, sólo eso,
ausencia y abandono desnortado
bajo el paisaje helado del olvido.
¡Quién sabe si después
el tiempo y sus razones
recoloquen el turno
del arrepentimiento…!
Pero ya será tarde,
y ungidas en desuso
nos curtirá el abrazo
rendido al desapego.
Reposará la pluma
envuelta en añoranzas
celosa de la tinta
que acarició sus letras.
Y al alba, nuestros versos
ingrávidos y errantes
caminarán descalzos
sobre la indiferencia…
¡Y tú y yo, seremos,
repletas de pasado,
historia postergada,
parábola inconclusa
que aguarda la leyenda
de la resurrección!
hola alma ragatzzi muy bonita entrada me gusta mucho como escribes tienes madera de escritora heeeee un fuerte abrazo ¡ me gusta mucho la decoración de tu blog esta muy chulo !
ResponderEliminarHola Hadama...
ResponderEliminarAgradezco muchísimo tu comentario y tu tiempo. Respecto a lo de escribir... bueno, se hace lo que se puede. No se si tengo madera de escritora, pero es mi pasión y mi eterno refugio,y como tal me expreso, sin esperar condecoraciones, pero es muy gratificante saber que además de a mí misma, hay a alguien que le gusta lo que escribo.
Un abrazo desde el alma, Hadama, ya ya sabes que tienes las puertas abiertas.