A Zeus, mi hijo...
Por la noche, mientras duermes
quisiera entrar en tus sueños
para saber lo que pasa
por tan pequeño cerebro,
para adentrarme en tu mundo
tan infantil y tan tierno
y poder volar contigo
tal alto que llegue al cielo...
Y así compartir contigo
esos, tus pequeños sueños.
1987
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